Y definitivamente reconoceré cuan épico se puede llegar a ser aun siendo católico.
Estos dos grupos tienen las agallas para organizarse y expresar su desacuerdo con el Vaticano en cuanto a dos asuntos que parecen ser de suma importancia para este, los cuales, además de no tener sentido lógico, son altamente discriminatorios e intolerantes.
Católicos por la igualdad
Sé que suena extraño, pero creo que hay algo de cierto aquí. Pienso que debido a que muchos católicos llegaron a los Estados Unidos como inmigrantes, primero de Irlanda, y luego de Latinoamerica, al verse como inmigrantes pudieron desarrollar cierta tolerancia hacia otros grupos.
Sin embargo, en los países latinoamericanos, donde la iglesia católica es mucho más poderosa, difícilmente vamos a encontrar esta actitud, sino, la clásica intolerancia hacia los homosexuales que se predica en los púlpitos en hostia y hostia.
Pero esto es bueno. Si bien en general los católicos no son tolerantes para con los gays, este grupo trata de hacer algo distinto. Tal vez hasta entendieron el mensaje de Jesús correctamente, el de amarse los unos a los otros (Juan 15, 9) sin importar que uno sea un samaritano u otra persona poco apreciada por la mayoría. Obviamente, pensar que Jesucristo existió, hizo milagros, caminó sobre el agua y resucitó sigue siendo una gran patraña. Pero si no afectan a nadie, no es problema mío.
El Vaticano, obviamente, estaría en desacuerdo
Lo cual básicamente significa, los gays nos preocupan porque a Dios no le gustan y a nosotros tampoco
Así bien por aquellos católicos que apoyan la igualdad. En lugar de criticarlos por ser católicos, creo que es mejor el reconocer este como un primer paso fuera de la homofobia y quizás, otras tonterías que son parte de la iglesia católica.
Católicos por el derecho a decidir
Otro asunto que preocupa mucho a la iglesia católica (que definitivamente no son sus escándalos de abusos sexuales) es el aborto. Pero no solo el aborto, sino todo método de planificación familiar que no sea el del ritmo. En otras palabras, la iglesia católica prefiere ver familias con varias niños a los que no se les puede dar la calidad de vida que se desea, en lugar de una pareja usando un condón.
Dado que no usar un condón a la hora de tener relaciones sexuales y simplemente esperar que la mujer no se embarace es una de las cosas más estúpidas que se puede hacer, la mayoría de personas con dos dedos de frente, católicos o no, usarán un condón, o un anticonceptivo. Y si hay un embarazo, lo lógico, justo y necesario es sopesar si este afectará no solo la vida de los padres, sino la del niño (que por cierto, aun no es un niño). Pero dado que la posición oficial católica es en contra de la planificación familiar, apareció un grupo que apoya a los católicos que desean tener el derecho a decidir.
Lo mismo que los católicos por la igualdad. Están en desacuerdo con la posición oficial del Vaticano, pero mantienen la etiqueta de “católicos”. Pero sus esfuerzos son valederos. Mientras más conocimiento, educación y oportunidades haya el problema de fondo, que es la pobreza y la falta de calidad de vida irán desapareciendo. Por supuesto, las religiones hacen su agosto cuando no hay conocimiento ni educación. Si por el Vaticano fuera, esta sería el único método anticonceptivo legal
En pocas palabras, el Vaticano se opone a la planificación familiar debido a que cree que todo acto sexual debe estar abierto a la vida y no servir solamente como placer. Una visión tan anacrónica, misógina, represiva y cruel lo deja a uno con la boca abierta. Hoy en día tenemos los métodos para disfrutar en pareja sin tener que preocuparnos por un embarazo.
Es así que aunque sean pequeños, estos son valiosos pasos que bien pueden irse alejando de la irracionalidad del Vaticano para dirigirse al futuro. Es bueno que un grupo de católicos se de cuenta cuan estúpido es dejar de lado la posibilidad de usar métodos anticonceptivos solo porque el Papa lo dice. Y como dije más arriba, en lugar de criticarlos consideremos este un primer paso hacia la libertad de mente.
Católicos por la igualdad
Católicos por la igualdad (Catholics for Equality) apoya a los católicos que defienden la igualdad a usar nuestra fe en acciones políticas éticas y efectivas a favor de la comunidad LGBT y de sus familias.
A partir de la rica tradición católica de enseñanzas de justicia social basadas en el evangelio de amor, los católicos estadounidenses están entre los más fuertes partidarios de la igualdad para las lesbianas, gays, bisexuales y transexuales comparados al resto de grupos religiosos en los Estados Unidos.
Sé que suena extraño, pero creo que hay algo de cierto aquí. Pienso que debido a que muchos católicos llegaron a los Estados Unidos como inmigrantes, primero de Irlanda, y luego de Latinoamerica, al verse como inmigrantes pudieron desarrollar cierta tolerancia hacia otros grupos.
Sin embargo, en los países latinoamericanos, donde la iglesia católica es mucho más poderosa, difícilmente vamos a encontrar esta actitud, sino, la clásica intolerancia hacia los homosexuales que se predica en los púlpitos en hostia y hostia.
Pero esto es bueno. Si bien en general los católicos no son tolerantes para con los gays, este grupo trata de hacer algo distinto. Tal vez hasta entendieron el mensaje de Jesús correctamente, el de amarse los unos a los otros (Juan 15, 9) sin importar que uno sea un samaritano u otra persona poco apreciada por la mayoría. Obviamente, pensar que Jesucristo existió, hizo milagros, caminó sobre el agua y resucitó sigue siendo una gran patraña. Pero si no afectan a nadie, no es problema mío.
El Vaticano, obviamente, estaría en desacuerdo
La homosexualidad es un fenómenos moral y social problemático, incluso en aquellos países donde no hay asuntos legales presentes. Origina una preocupación mayor en aquellos países donde se ha otorgado o pretende otorgarse reconocimiento legal a las uniones homosexuales lo cual puede incluir la posibilidad de que adopten niños.
Lo cual básicamente significa, los gays nos preocupan porque a Dios no le gustan y a nosotros tampoco
Así bien por aquellos católicos que apoyan la igualdad. En lugar de criticarlos por ser católicos, creo que es mejor el reconocer este como un primer paso fuera de la homofobia y quizás, otras tonterías que son parte de la iglesia católica.
Católicos por el derecho a decidir
Otro asunto que preocupa mucho a la iglesia católica (que definitivamente no son sus escándalos de abusos sexuales) es el aborto. Pero no solo el aborto, sino todo método de planificación familiar que no sea el del ritmo. En otras palabras, la iglesia católica prefiere ver familias con varias niños a los que no se les puede dar la calidad de vida que se desea, en lugar de una pareja usando un condón.
Dado que no usar un condón a la hora de tener relaciones sexuales y simplemente esperar que la mujer no se embarace es una de las cosas más estúpidas que se puede hacer, la mayoría de personas con dos dedos de frente, católicos o no, usarán un condón, o un anticonceptivo. Y si hay un embarazo, lo lógico, justo y necesario es sopesar si este afectará no solo la vida de los padres, sino la del niño (que por cierto, aun no es un niño). Pero dado que la posición oficial católica es en contra de la planificación familiar, apareció un grupo que apoya a los católicos que desean tener el derecho a decidir.
Desde nuestra fundación en 1994, en Católicas por el Derecho a Decidir (CDD) producimos y distribuimos documentos educativos y de reflexión, para aportar argumentos sólidos que sustentan el derecho a decidir y la defensa de los derechos de las mujeres desde una perspectiva católica feminista y para contribuir a cerrar la brecha que existe entre los derechos sexuales y reproductivos por una parte, y la justicia social, la pobreza y la democracia, por la otra
Lo mismo que los católicos por la igualdad. Están en desacuerdo con la posición oficial del Vaticano, pero mantienen la etiqueta de “católicos”. Pero sus esfuerzos son valederos. Mientras más conocimiento, educación y oportunidades haya el problema de fondo, que es la pobreza y la falta de calidad de vida irán desapareciendo. Por supuesto, las religiones hacen su agosto cuando no hay conocimiento ni educación. Si por el Vaticano fuera, esta sería el único método anticonceptivo legal
En pocas palabras, el Vaticano se opone a la planificación familiar debido a que cree que todo acto sexual debe estar abierto a la vida y no servir solamente como placer. Una visión tan anacrónica, misógina, represiva y cruel lo deja a uno con la boca abierta. Hoy en día tenemos los métodos para disfrutar en pareja sin tener que preocuparnos por un embarazo.
Es así que aunque sean pequeños, estos son valiosos pasos que bien pueden irse alejando de la irracionalidad del Vaticano para dirigirse al futuro. Es bueno que un grupo de católicos se de cuenta cuan estúpido es dejar de lado la posibilidad de usar métodos anticonceptivos solo porque el Papa lo dice. Y como dije más arriba, en lugar de criticarlos consideremos este un primer paso hacia la libertad de mente.
Para que despues no digan que nosotros los ateos le echamos la culpa a la relgion hasta del porque se creo el Windows Vista
ReplyDeleteSer catolico es creer lo que el magisterio de La iglesia dice que ay que creer, según interprete la jerarquía, que para eso es vicaria de la 2º p. y teledirigida por la 3ª p.
ReplyDeleteEs sorprendente el enorme porcentaje de autodenominados catolicos que practican y creen licito el libre examen de la doctrina; creer y hacer lo que les parece conveniente.
Que seamos tan inmunes a los razonamientos ni que sea de logica formal.
Pero sí que es bueno y pa alegrarse que haya creyentes de cualquier secta que no sean agresivos con los equipos contrarios.