De la religión de paz que está dispuesta a matar para probar que lo es

Ya han pasado casi 4 días desde que la violencia en el medio oriente, obra y gracia de enfurecidos e indignados musulmanes, le confirmara al mundo lo pacíficos que son.

El chusco filme de marras

Como ya sabemos, todo empieza con un supuesto trailer para una película que insulta al profeta Mahoma y lo muestra como alguien de limitada inteligencia, además de un pederasta y un homosexual. Nada muy halagador en verdad. El video es obra de un cristiano copto llamado Nakoula Basseley Nakoula radicado en California y que ya había tenido algunos roces con la ley por suplantación de identidad y otros cargos. El trailer luego fue promocionado por el pastor Terry Jones, aquel que causó revuelo al quemar el Koran.

Trolls trolling trolls

Hay que resaltar que el filme original no tenía la tonalidad que tiene aquel que fue doblado al árabe y que causó la furia de los musulmanes. Y he aquí algo bastante resaltante, que es la forma en que un creyente de una fe muestra al líder de otra fe. Ciertamente es esta una linda manera de demostrar el cariño y el amor que inspiran las religiones.

A esto muchos responderán "Pero esos son extremistas", o el tan manoseado "Pero esos no son verdaderos creyentes", en donde se asume que "verdaderos creyentes" son solamente aquellos que calzan en la visión individual de quien hace el juicio. El día que los respectivos representantes de las distintas religiones bajen a decir quienes son y quienes no son "verdaderos creyentes", ese día recién podremos hablar de ellos con seguridad.

Es innegable que el filme fue hecho con el propósito de insultar al Islam, de eso creo que no cabe duda. Pero de ninguna manera eso es motivo para reaccionar como reaccionaron tantos ofendidos musulmanes:

Embajador de EE.UU. en Libia muere tras ataque por filmación sobre Mahoma
 

El embajador de Estados Unidos en Libia, Christopher Stevens, y otros tres ciudadanos de ese país murieron tras el ataque al consulado estadounidense el martes en la ciudad de Bengasi, en el este del país, confirmó el presidente Barack Obama en un comunicado oficial.

Esto es lo que pasa cuando la fe y las creencias toman control del comportamiento de un grupo de personas, cosa que no es poco común cuando estas creencias, como parte de una tradición de un grupo humano, son ensalzadas y protegidas, y se pretende que son de alguna forma respetables. No lo son. El Islam, como en menor medida el cristianismo, busca posicionarse por encima de toda razón y todo pensamiento y dirigir las acciones de sus miembros. Así es que si el profeta es mostrado e insultado, cosa condenada en el Koran, la razón se nubla y alguien tiene que morir, así sea alguien que no tiene nada que ver con el filme o con el mensaje de este.

A estas alturas, el que un grupo de adultos maduros reaccione como chiquillos que lloriquean y destruyen lo que encuentran a su paso cuando algo que no les gusta ha sucedido debería ser un hecho fuertemente repudiado. Y sin embargo, no faltan quienes tratan de explicar que la culpa recae en el creador del filme por haber "provocado" a los musulmanes. El filme es ciertamente provocativo, pero pretender que no se diga nada que pueda ofender a un grupo de personas es exactamente lo mismo que ceder a las presiones de un grupo de matones que no puede sino reaccionar como una manada de animales ante cualquier criticismo hacia sus supersticiones particulares.

"Perdón gente de América, este no es el comportamiento de nuestro Islam y profeta"

¿Seguro?

Ahora, esto no quiere decir que todos los musulmanes caigan en este rubro, tal como lo demuestra la imagen de arriba. Pero sí quiere decir que la creencia que se predica busca generar resultados como los que hemos visto. ¿Acaso no está condenado el mostrar al profeta? ¿Acaso no se condena a los infieles? ¿Acaso no se condena el abandonar la fe? Los religiosos moderados son, en gran parte, responsables también por los conflictos religiosos en el mundo, puesto que sus creencias proveen el contexto en el cual el entendimiento literal de las escrituras y la violencia religiosa no pueden nunca estar adecuadamente opuestas la una a la otra. Y eso no es patrimonio del Islam. Dentro del cristianismo abundan aquellos que predican amor y compasión y vida en Cristo, pero callan cuando otros cristianos, en nombre de la misma fe, le niegan derechos a los homosexuales o buscan evitar el uso de anticonceptivos.

Y es así, que mientras los moderados tratan de blanquear la cara del Islam, las protestas violentas, en nombre del mismo Islam, continúan. En Sudán, las embajadas de USA, Alemania e Inglaterra han sido atacadas, como si estas tuvieran algo que ver con el filme. Pero eso no ha detenido a quienes buscan vengar el insulto a su profeta, sin darse cuenta al hacer eso nos demuestran lo miserable que este es al necesitar que sus seguidores lo defiendan. Como diría Hulk, "puny god."